Mantener al día la vacunación y desparasitación de nuestras mascotas es clave para su salud y para la de toda la familia. Las vacunas protegen contra enfermedades graves como el moquillo, el parvovirus o la rabia, mientras que la desparasitación previene la transmisión de parásitos internos (lombrices) y externos (pulgas, garrapatas o mosquitos).
¿Sabías que muchos dueños de mascotas creen que los animales que no salen de casa no necesitan estas medidas? Esto es un mito: los parásitos pueden entrar en el hogar en nuestra ropa, zapatos o incluso por el aire. Por eso, es fundamental establecer unas pautas de desparasitación tanto interna como externa para garantizar el bienestar de toda la familia.
Los cachorros y gatitos necesitan un calendario más frecuente de vacunas y desparasitaciones que los adultos, y en los animales mayores es recomendable realizar revisiones anuales para ajustar la pauta.
Consultar con un veterinario permite establecer un plan personalizado según la edad, el estilo de vida y los riesgos de la zona. Mantener estas medidas preventivas al día es mucho más fácil y económico que tratar una enfermedad grave una vez que ya ha aparecido.
